Emil Hünten

Johann Emil Hünten, nacido el 19 de enero de 1827 en París y fallecido el 1 de febrero de 1902 en Düsseldorf, fue un destacado representante de la Escuela de Düsseldorf y gozó de reconocimiento en vida por su amplia obra artística. Fue especialmente conocido y honrado por sus representaciones históricas de la vida de Federico el Grande y por su pintura de sucesos e historia, que alcanzó su apogeo durante su vida. Junto a Hünten, Adolph Menzel, Wilhelm Camphausen y Georg Bleibtreu fueron algunos de los artistas más importantes de esta época.
El movimiento naturalista estuvo presente en muchos países europeos, pero sólo en Francia se desarrolló hasta convertirse en el movimiento realista. Hijo del compositor de piano parisino François Hünten, Johann Emil comenzó su formación artística en la Escuela de Bellas Artes de París bajo la tutela de Hippolyte Flandrin y Horace Vernet. Posteriormente continuó sus estudios en Amberes, donde recibió la influencia de artistas como Gustave Wappers, Josephus Laurentius Dyckmans, Nicaise de Keyser y Hendrik Leys.
Tras completar sus primeros estudios ecuestres en Coblenza durante su estancia en la artillería prusiana, Hünten se instaló en Düsseldorf en 1854. Allí fue alumno de Wilhelm Camphausen e ingresó en la asociación de artistas «Malkasten». Aquí profundizó en sus estudios sobre caballos y creó obras importantes como «Coraceros de la época de Federico II, cargando por un puente». Más tarde, con su cuadro «Batalla de Krefeld» en 1860, se inclinó por motivos contemporáneos.
Durante la campaña de Schleswig-Holstein en 1864, Hünten acompañó inicialmente a la brigada austriaca. Fue uno de los pocos artistas, entre ellos Camphausen, Bleibtreu y Louis Braun, que estuvieron cerca de las tropas combatientes. Más tarde, durante la guerra franco-prusiana de 1870/71, visitó varias veces los campamentos del ejército y los campos de batalla, lo que confirió a sus obras un realismo extraordinario.
Hünten siguió trabajando incansablemente hasta su muerte. En 1878 ingresó en la Academia de Berlín, de la que fue catedrático en 1879. Entre sus alumnos se encontraban pintores de renombre como Ernest Crofts, Ludwig Fay y Moritz Blanckarts. Sus obras eran apreciadas tanto por clientes públicos como por ciudadanos adinerados.
Los cuadros de Hünten, que a menudo tienen un carácter documental, contrastan con la pintura romántica de su época y fueron apreciados por su representación objetiva. Destacan sus cuadros de batallas, en los que capta magistralmente el movimiento de los caballos. Sus obras también inspiraron a escritores como Theodor Fontane y sirvieron de fuente de información para historiadores y literatos.
Desde su creación, las obras de Hünten han sido ampliamente reproducidas. Hoy en día, muchas de sus pinturas se ofrecen como impresiones digitales sobre lienzo y su importancia artística permanece, como en la exposición de obras de arte durante la Semana del Festival Internacional de Música «Bergisches Musikfenster 2007».

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