Jacopo Amigoni

Jacopo Amigoni, (1682-1752) fue un pintor rococó veneciano, conocido también con diversos nombres como Giacomo Amiconi, Jakob Amigoni y Santiago Amiconi. Nació en Nápoles en 1682 y murió en Madrid el 21 o 22 de agosto de 1752. Su obra artística es amplia e incluye pinturas, frescos, dibujos y grabados de los estilos barroco tardío y rococó.
Pertenece a la escuela veneciana de pintura y, junto con Sebastiano Ricci y Giovanni Antonio Pellegrini, es uno de los pioneros del rococó. Gracias a sus actividades en muchas partes de Europa, Amigoni desempeñó un papel destacado en la difusión de este nuevo estilo artístico.
Cabe destacar el papel de Amigoni como retratista en la Italia de principios del siglo XVIII. Sobre todo, sus obras creadas en Alemania antes de 1730 y su participación en el diseño de frescos influyeron considerablemente en el desarrollo del rococó del sur de Alemania e influyeron en artistas como Johann Baptist Zimmermann, Franz Joseph Spiegler y Franz Anton Erler.
Con el tiempo, el estilo de Amigoni evolucionó desde el barroco tardío, con una paleta de colores rica y vibrante, hacia un rococó más ligero, caracterizado por tonos más sutiles, delicados y, en general, más fríos. Su pincelada era fluida, suave y suelta, y se inspiraba principalmente en las tradiciones de la pintura veneciana, con la influencia de Antonio Bellucci particularmente evidente en el modelado de las figuras.
En sus desnudos, las figuras se idealizaban de forma clásica y los cuerpos se caracterizaban por un modelado liso y contornos suaves. Las transiciones entre las partes del cuerpo desnudas, incluidos los brazos y el escote en los retratos, eran a menudo borrosas y parecían fundirse con el entorno. Esto se aplica en particular a la representación de figuras femeninas. En sus frescos posteriores a Schleißheim, las figuras parecen menos dramáticas y están dispuestas en una pose suelta y relajada.
Con el tiempo, especialmente tras su regreso a Italia en 1739, su estilo mostró una ligera tendencia hacia el clasicismo, con composiciones de figuras más sencillas y una paleta de colores más clara y fría. Sin embargo, la pintura de Amigoni sigue siendo más suave y sobria que la de Tiépolo, aunque se inspire aquí y allá en su colega más joven.